Las casas en esta ciudad son muy altas, de altos techos y grandes ventanales. Al mismo tiempo son muy profundas. Pero, por el contrario, son llamativamente estrechas. Esto se debe, fundamentalmente a que, a más metros de anchura en la fachada, mayor impuesto hay que pagar. Es decir, pagas por "lo que muestras" o por lo que ocupas de fachada.
Es curioso porque esto tiene consecuencias. Al ser tan estrechas, las escaleras también lo son, lo cual supone un problema a la hora de las mudanzas. Por este motivo todas las casas tienen un gancho arriba de sus fachadas. Las mudanzas se hacen ¡¡por la ventana!!
2. Las casas flotantes
Cuando vas caminando por los canales puedes contemplar numerosos barcos-casas. ¡Y menudas casas! Están ancladas cual barco, pero son de grandes dimensiones. Además, el tejado es utilizado normalmente como terraza, por lo que puedes ver a los dueños de las casas flotantes tomar el sol tranquilamente, encima de sus casas.
Muchos prefieren este tipo de hogar por la comodidad de poder mudarte cuando se te apetezca; solo tienes que soltar el ancla.
3. No usan cortinas
En Ámsterdam la intimidad está muy respetada, tanto que ni piensan en la necesidad de esconderse; se da por hecho que nadie va a mirar por tu ventana.
Se puede ver absolutamente todo, sobretodo si paseas en barca por el canal, pues posees mejores vistas.
4. Barrio rojo
Dentro de la ciudad se sitúa el conocido "barrio rojo" conocido por el color que le da nombre y lo ilumina por las noches, además de concentrarse en él gran cantidad de locales de prostitución. Allí la prostitución es legal, un trabajo más.
De hecho, llama la atención la normalidad con la que se trata. Puedes pasear por las calles del barrio y observar a las prostitutas hacer bailes desde las ventanas de los locales, como si de maniquís vivientes se tratase.
5. Legalidad de la marihuana
Al igual que la prostitución, la marihuana también es legal. Hay gran variedad, según su pureza, efectos y tamaños. Normalmente los bares donde se puede consumir son denominados "Coffe Shop". Además, hay numerosas tiendas donde se venden chupa-chups, pasteles, golosinas... de marihuana.
Es completamente habitual.
6. La bicicleta como medio de transporte
Por último, una de las cosas que más llaman la atención nada más aterrizar en la ciudad es la gran cantidad de bicicletas, tanto en circulación como aparcadas.
La bicicleta es un vehículo más, con carriles y semáforos adaptados a ellas. Dado la cantidad de bicicletas circulando y señales, se hace algo complicado, pero no por ello menos divertido y aconsejable. Es el medio más rápido para moverte por Ámsterdam; todo te pilla cerca.
La bicicleta es un vehículo más, con carriles y semáforos adaptados a ellas. Dado la cantidad de bicicletas circulando y señales, se hace algo complicado, pero no por ello menos divertido y aconsejable. Es el medio más rápido para moverte por Ámsterdam; todo te pilla cerca.
Cierro esta entrada con esta foto de un parking de bicicletas que me impactó enormemente.
¡Hasta pronto amigos!
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